jueves, 20 de diciembre de 2007

The Masquerade

¿Me conoces? ¿Te conozco? ¿Te conoces? ¿Me conozco?
Nos cruzamos. Veo tu rostro, ¿o quizás no? Hablamos, y creo conocerte, pero ¿te conozco? Pasa el tiempo y seguimos compartiendo vivencias y crees conocerme, pero ¿me conoces?
A veces creemos conoc
er a gente, pero ¿les conocemos realmente? ¿O tan solo vemos lo que quieren mostrar? Quizás tan solo sea pura fachada, una máscara que esconde su verdadera identidad. Y que es el mundo, que es la gente, que es la sociedad, si no nada más que un baile de máscaras que dura eternamente. Un sin parar de mentiras piadosas, sorpresas desagradables, decepciones y frustración. Y yo te pregunto ¿sabes quien eres? ¿sabes quién soy? No es fácil responder a estas preguntas, pero más difícil es intentar conocer sin conocernos a nosotros mismos.
¿Has sido completamente sincero con alguien alguna vez? Todo sería tan fácil… Decir te quiero, decir me importas, o simplemente con una mirada mostrar el aprecio que sientes por esa persona que ha andado contigo, tan solo poder dar las gracias por dejar que nos cobijáramos bajo su paraguas aquél día de lluvia en el que el agua parecía arrastrarnos. Pero pocas veces esto sucede. ¿Cómo encontrar una mirada detrás de una máscara? ¿Cómo sentir cariño por alguien que no es?

Salgo a la calle y no veo más que máscaras observándome divertidas con sus ojos sin vida. Y tengo miedo. Me da miedo este eterno baile que parece no tener fin.

Hoy llueve, y yo me mojo bajo la lluvia rodeado de sonrisas que no existen. Hoy miro al mundo desde mi ventana y las gotas de agua me hacen ver un mundo que no es real ¿o si lo es? Hoy estoy empapado de sentimientos y sensaciones que soy incapaz de expresar. Hoy salgo a la calle y me pongo de nuevo la máscara. Hoy llegas tú con un paraguas. Hoy te miro a los ojos y me sonrío. Hoy cobijándome de la lluvia bajo tu paraguas observo tu rostro y te pregunto. “Nos quitamos la máscara?"


"Cuando el sol brilla, brillamos juntos. Te dije que estaría aquí para siempre, que yo siempre seré tu amigo. Ahora llueve más que nunca, pero nos tenemos el uno al otro. Puede cobijarte bajo mi paraguas..."


"Umbrella" cover de Mandy Moore

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Primer, jeje. Pues yo creo que nadie conoce a nadie realmente. Pdemos conocerlos mucho pero al 100% no porque supongo que ni nosotros nos conocemos al 100%. Yo tengo la suerte o desgracia de que me abro mucho a mis amigos y ellos me conocen mejor que yo la verdad, saben anticiparse a mis movimientos.
A mi lo que sí me pasa muchas veces por la cabeza cuando voy por la calle es que todas esas personas que ves y que son desonocidas detrás de esa cara tienen una vida, unos amigos, unos sentimientos, unas necesidades, unos problemas.. no sé.. ya me he rallao otra vez!

BSSS

Anónimo dijo...

No. No conocemos realmente a los demas. Podemos estar cerca de conocer a alguien, tal vez, si, pero creo que es solo durante un tiempo, durante una etapa de nuestras vidas. Pero no mas. Es tan imposible como lo es conocernos a nosotros mismos 100 %.
Cada persona que nos cruzamos tiene una historia detras, pero parece que existe un muro entre ellos y nosotros, la mascara como tu dices. Hoy mismo, he estado comiendo con unos compañeros de clase, y durante un instante he notado esas mascaras mas nitidas que nunca. Pero solo un instante. Luego todo como siempre. Pero ahi esta la mascara. Su mascara, mi mascara. Ojala pudiera quitarmela yo tambien.

Besos majo!

PD: Yo tambien me he mojado. Aqui esta lloviendo...

Anónimo dijo...

Hay gente que es muy transparente y otra que nunca se llega a conocer, pero ¿nos molestamos en querer conocer a la gente?
Un beso.

Ajostiernos dijo...

A veces nos queremos quitar la máscara... Pero ante las máscaras de los demás no nos atrevemos a exponer nuestros rostros si ellos no lo hacen y te van a mirar con miradas reprobadoras desde detrás de sus fachadas.

O quizá no sea eso. Quizá sea simplemente que muchas veces nos creemos las máscaras de los demás hasta tal punto que creemos que nosotros somos los únicos que llevan puesta una. Quizá no nos la quitemos para no decepcionar.

Yo todavía no he encontrado a nadie que se haya quitado la máscara delante mía. Quizá se hayan asomado un poco, pero hasta ahí. Ni siquiera mi propia madre es una excepción. A día de hoy todavía me entero de cosas que ella nunca se atrevió a admitir delante mía. Pero no puedo ni quiero juzgarla, pues yo también cometo los mismos pecados, quizá peores.

Besos.

Lance dijo...

Creo que nunca se llega a conocer a nadie del todo, ni nos llegamos a conocer a nosotros mismos del todo, puede que sea por los cambios constantes que pasamos y pasan los demás(como dice el post de Link).

Aveces me gustaría tanto poder quitarme la máscara, ultimamente tengo ganas de dejar de fingir, de mostrarme tal y como soy, siempre mentimos por los demás, para que no utilizen lo que pensamos contra nosotros mismos, pero yo me he cansado de seguir con la máscara, me gustaría poder quitarmela del todo sin miedo aunque solo fuera con una persona, el mundo sería completamente distinto si todos nos quitaramos las máscaras, no sé si mejor, pero sin duda diferente...

Has conseguido que me guste más esta versión de la canción que la otra, como te he dicho antes va más acorde con el significado de la canción o eso creo...

Me ha encantado el post, ha sido desaparecer un día y al volver ver que habeis echo unos post geniales...jeje.

Muchos Besos!

salva dijo...

Niño un post precioso, escrito con maestría, con grandes preguntas que a su vez constituyen respuestas. Me explico: cuando preguntas al aire si nos conocemos realmente es como una pregunta con respuesta omitida porque nadie se conoce realmente, es realmente díficil conocerse.
UNa persona sabe más o menos como es, lo que le gusta de los demás, lo que le gusta de la vida puede prever su comportamiento en determinadas situaciones pero a veces la vida nos pone a prueba y ante situaciones que se dan nos comportamos de una manera diferente a lo que creíamos que haríamos y nos damos cuenta de que no nos conocemos, de que nunca nos acabámos de conocer porque somos emocionales y las emociones muchas veces se anteponen a la razón y aunque pueda parecer paradójico en eso está la gracia. La vida y nosotros mismos en la medida de lo posible somos imprevisibles, lo importante es intentar dañar lo menos posible con nuestros actos o con nuestras emociones incontroladas.

La vida es un baile de máscaras como dices, y todos llevamos una.
Máscaras, muros que nos separan, cosas que no se dicen nunca pero que se saben, secretos dichos a "cau d´orella". Nadie conoce a nadie.

Me encanta el post.
Y de verdad que cuando tenga tiempo actualizco pero es que me apetece poco, yo soy más un comentarista que un bloggero.
Me ha gustado mucho descubrir este blog, decirte que me sorprende mucho que con 18 años tengas tanta madurez y lucidez.

Anónimo dijo...

Para mi, las máscaras forman parte la gente, tanto como la sinceridad y lo que hay debajo. Si lo piensas bien, a veces una máscara dice mucho más sobre alguien que todo lo que pueda esconder.

Petons!

Kichiaya dijo...

Sabes? La vida es teatro y nosotros nos inventamos personajes. Así sin más, para impesionar, para ligar, para reforzar nuestros miedos, para crear corazas de acero contra las balas invisibles que nos hieren.

Pero luego hay momentos, cada cual con los suyos, en los que volvemos a ser niños sin prejuicios, que les cambiamos el cero cabelludo a los playmobill.

Felices y blancs fiestas!